Recomendados Cacofonicos #1

Texto por Jefferson Mejía

Recomendaciones de literatura para regalar/nos empezando de la mejor manera este veinte-veinte, porque no hay mejor regalo que un libro, acá le apuntamos varios.

Ni listado Arcadia ni listar por listar. El presente es un puñado de recomendaciones literarias que bien pueden ser regalos para dar a las personas que queremos o para nosotros mismos. Insisto con el regalo Porque no hay mejor regalo que un libro.

Libro de hallazgos (2019), Yessica Chiquillo, Sebastian Cadavid.
Animal Extinto Editorial.

Nos conocemos mejor cuando leemos los diarios de otros, por contraste o identificación. Es la única forma que concibo de invasión a la privacidad de alguien que ni tan en el fondo ha querido ser leído de esta manera. Recomendaría además este inventario íntimo porque, tal como en la biografía de la autora en la solapa que “Ha encontrado en los libros un medio para comprenderse mejor y repensar la manera como se relaciona con el mundo. Le aflige no ver bien.” Obsequiar este libro a alguien a quien queremos será un muy bello regalo, no solo por la ternura que evocan las ilustraciones de Cadavid y las notas de la autora, sino porque se recordará, entre otras cosas, la necesidad de inventariar nuestra breve y siempre muy pobre educación, sino también la urgencia de seguir leyendo cada vez más, cada vez mejor.

Aves inmóviles (2019) Julio Paredes.

Editorial Alfaguara.

Ha sabido preservar el cuerpo de la novela como solo saben los maestros en su oficio. Con sencillez pero sin el más mínimo titubeo Julio Paredes, en su más reciente novela, publicada por Alfaguara lleva al lector de principio a fin por una historia colmada de silencios y procesos mentales que vivimos desde el mundo interno del protagonista. La habilidad de Paredes, a quien me alegra haber descubierto al final de la década pasada, el estilo del autor en esta novela radica quizás en incluir el influjo de la vida en todos los actos humanos: no hay cuerpo, que trasladándose de un punto A a un punto B llegue intacto y sin cambios, sucede el tiempo. Nunca somos los mismos de antes y sin embargo.

Si hay quien considere la novela un arte muerto, este escritor colombiano ha sabido rebatir esta mentira y nos entrega una pieza, tan hermosa como los animales preservados del taxidermista, un algo que ya no es ni escultura ni cosa viva; una obra digna no de museo pero sí de la contemplación que requieren de nosotros los libros: leer con los ojos bien abiertos, en silencio tal vez, buscando costuras y deslumbrados por el color de sus plumas reconociendo en ellas y todas las cosas, el paso del tiempo y la vida.

La metaformosis (2019), Oscar Pantoja.
Resplandor Editorial.

¿Quién es realmente la cucaracha de esta historia?, ¿el escritor, el lector, el bicho protagonista o la Bogotá a la que hace referencia? Esta es una novela corta, de sensaciones desagradables, muy bien escrita por un autor colombiano con un recorrido más que impresionante. La premisa no es otra vuelta de tuerca sino una arrancada de muela chambona -en contraste a La Metamorfosis de Franz Kafka que contaba la historia de un hombre que despierta, luego de un sueño intranquilo, convertido en un enorme bicho, una cucaracha gigante-, la de Pantoja es la de una cucaracha que pasa a ser hombre. Un psicópata, un utilitarista, un bicho horrible que resulta más bien un reflejo encharcado de nuestros peores aspectos como seres humanos.

Diría incluso que esta es una novela útil para confrontarse como hombre colombiano, que sospecha a medias tener noción de su machismo y sus excesos (así funcionó para mí: ¿hasta qué punto hay que llegar para decirse que una historia como esta, en las posibilidades más absurdas de la realidad, no resulta tan improbable?, ¿en qué momento dejó de sorprendernos que existan tantas drogas, tantas armas, tantas malas personas haciendo tanto mal? ¿en qué momento nos volvimos cómplices de las cosas que están mal en el mundo porque no pudimos derrotarlos y nos unimos a ellos?

Que si es moralista, sí. Pero en tiempos tan adversos no sobran, por el contrario, hacen falta libros que nos confronten con nosotros mismos y los valores.

Más allá de lo que en mí perdura (2019) Beatriz Ordoñez.
Villegas Editores.

Hay que estar muy enamorado para escribir semejantes palabras como las que organiza Ordoñez en sus sonetos. Hay que estar muy enamorado para identificarse con ellos. Versos como fruta madura, bien pueden estar a punto de pudrirse o en su punto, para saborear con el oído, mientras un amante le lee a su cómplice en voz alta. Perfecto para enamorados, parejas de casados y jodidos que creen desesperada y pacientemente en esa cosita llamada amor. Nuestra ignorancia literaria nos hace decir: muy cursis. Y sí, pero también: palabras fríamente calculadas, cocidas y cosidas con la laboriosidad que requieren las tareas del hogar.

–Rosina o la prisión del castillo de Chagres
*El Caso de Juan José Nieto Gil. Filomena Edita.

No solo se trata de una de las tres novelas del único presidente afrodescendiente que hemos tenido en Colombia, esta es una historia rescatada del olvido gracias al trabajo de Filomena Edita, una editorial joven ganadora de más de tres becas para proyectos por parte de IDARTES.

Tiempos aciagos como los nuestros en los que el sentido de pertenencia a una nación parece no contemplar preguntas tan tontas como saber de dónde venimos, quienes somos y para dónde vamos como país, preguntas cuya respuesta parece ser una cosa oscura y difusa; reconocer el trabajo literario de un mandatario negro ninguneado por las élites tradicionales es quizás el mejor homenaje a su memoria y la valía de Los Otros: las mujeres ignoradas por siglos, los encarcelados injustamente, los protestantes que salen a las calles, los raros, los enfermos, los alienados.

Rosina o la prisión de Chagres y Los Moriscos son dos novelas escritas en el exilio de un presidente expulsado de su país por motivos políticos, raciales y de clase. En Rosina, particularmente, las voces femeninas nos llevan a través de la historia con temperamentos esperanzados en un día mejor y vale la pena leerlas, no solo como documentos de otros tiempos y valores distintos en las prioridades humanas sino para tener una noción de lo que era y en lo que se ha convertido nuestra patria…

Así mismo esta editorial incluye en sus novedades un repaso a las novelas escritas durante treinta años a propósito del holocausto del Palacio de Justicia.

Nuncaseolvida (2019) Alejandra Algorta
Ilustraciones al carbón de Ivan Rickenmann

Editorial Babel Libros

Las ilustraciones a carboncillo de Ivan Rickenmann de una Bogotá que no existe del todo le permitirán al lector darle este particular filtro a los recuerdos de nuestra infancia, mezclados con las imágenes de esta historia. Por momentos casi cinematográfica, realmente enternecedora, esta linda muy linda novela, desdibuja las etiquetas de lo juvenil y lo maduro. Ubicada en cualquiera de los barrios donde el verde desaparece y el color de los ladrillos en sus diferentes tonos se acumula, la autora ha sabido transmitirnos el olor de pan que todavía flota a veces en las calles, la textura rugosa de las raspaduras en el asfalto, la necesidad del viento en el rostro, el cansancio de los adultos y la desesperanza de saberse niños en una tierra difícil.

Este es un libro que le podemos leer a niños a la hora de dormir o bien a adultos que han olvidado el color de su primera bicicleta. Conmovedora como la alegría ajena de ver a alguien conocer el mar por primera vez. Esta novela merece ser obsequiada y celebrada.

Contacto, Carl Sagan.

En la práctica tenemos cosas más importantes que resolver, comenzando por nosotros mismos o nuestro país. No terminamos de contar nuestros muertos mucho menos tenemos tiempo de mirar las estrellas. Pero somos soñadores y esta novela nos ayudará a redirigir nuestros suspiros por un momento, fantasear con la urgencia humana de apostarlo, no todo, pero sí una considerable porción de nuestros esfuerzos en resolver la pregunta: ¿estamos solos en el universo? Es una excelente novela en términos de mala semilla. Ni tan lejana como para parecernos imposible, ni tan improbable como para incluirla como una nueva prioridad humana.

Esta novela desdibujó fronteras y nos sitúa en la única nacionalidad que deberíamos defender, la de la tierra, porque eso somos: terrícolas. Urge solucionar la hambruna en el mundo, la sistemática falta de educación y la persecución a las diferencias para que algún día, ojalá no muy lejano, pensemos entre todos en la urgencia de ponernos en contacto con alguna civilización avanzada que sea la prueba de nuestra motivación. La posibilidad ya debería ser suficiente para desbocar a todos en pos del espacio, pero mientras tanto se vale la pena soñar.

Listado final

Destaco también este otro breve listado de títulos que merecen ser leídos por motivos distintos pero que por temas de espacio y tiempo no hay chance para el detalle. Pero cabe advertir que todos son merecedores de ser compartidos y leídos por nuestros familiares y amigos. Hay de todo: historias de amor, de odio, guerras y drogas, sexo y pasiones humanas en todo su esplendor y también la esperanza de un nuevo tiempo de paz y amor para todos, sin importar lo que hayamos vivido, dicho o hecho.